Despedida a nuestro compañero Juan Antonio

Los miembros de A.E.M.A.G. Asociación de Personas con Enfermedad Mental del Alto Guadalquivir y la asociación de Familiares y Allegados Semillas de Futuro, dimos nuestro adiós el pasado día 18 de Diciembre a nuestro entrañable compañero Juan Antonio Albacete Amil.

   No quiero hablar de su muerte que como todas es triste, muy triste; sí de cuánto le vamos a echar de menos, de cómo le recordaré cada mañana en que su vozarrón interrumpía el silencio de mi despacho con un “ Buenos días Mary Jóse” y me informaba puntualmente de los éxitos de su equipo del alma el Real Madrid; de cómo superó su pánico al agua y cada semana disfrutaba en la piscina como lo hizo este año en la playa; de su incansable ir y venir cada tarde a “su escuela” como él la llamaba, después de cada mañana de actividades en nuestro Centro, le quedaba fuerza y voluntad para caminar con su mochila a cuestas hasta la escuela de adultos y una vez más quitarle la razón a los que creen en un destino inamovible, y demostrar que si uno se esfuerza , haya tenido las circunstancias que haya tenido, le da la vuelta a ese supuesto destino y se concede la oportunidad de tener lo que otro tiempo le robó.
   Quedará también en nuestro recuerdo ese abrazo muy apretado que daba a su sobrina , a su niña como él la llamaba, cada vez que inesperadamente entraba en el taller y lo sorprendía con la cabeza metida en su tarea y cómo se le iluminaba la cara cuando iba para su pueblo Pedro Abad, y no dejaba de nombrar a su cuñado y a cada uno de sus sobrinos.
   Juan Antonio es un ejemplo de cómo una persona con enfermedad mental puede integrarse y dejar atrás la incomprensión y el rechazo , él se ganó con su simpatía el cariño de todos los vecinos de Montoro que lo conocieron y que no olvidarán fácilmente su efusividad en el saludo y su afectividad .
   … Ponme música alegre me dijo el viernes pasado mientras dibujaba en el taller , porque él era alegre y así queremos recordarle.
   Sus familiares que con tanto mimo le cuidaron durante su enfermedad y a todos nosotros a quienes las circunstancias nos hicieron su segunda familia, nos quedará para siempre en el recuerdo su sonrisa, la sonrisa de nuestro querido Juan Antonio.

Fdo. María José García Sabán