Un monolito para recordar a los Salesianos de Pedro Abad

Antiguos alumnos del colegio Salesiano, de Pedro Abad, se reunieron ayer en el lugar donde se encontraba el antiguo seminario, hoy recinto ferial. En ese lugar se ha colocado un monolito en el que reza "En recuerdo del colegio Salesiano. De sus antiguos alumnos (1962-1974)", que fue bendecido por Antonio Altarejos, quien recordó que la obra surgió prácticamente de sus manos, desde el punto de vista de la dirección, ya que se hizo cargo de la misma en el año 1961 y que luego la dirigió como inspector en el año 1962, "todo debido a Ramón Vargas y Porras, que de una promesa de 5 millones de las antiguas pesetas, en el año 1959, conseguí que multiplicara por cinco su donación". También celebró que Juan Martín y Ramona, así como Ra
fael y María, "fueran los ángeles de la guarda de este edificio desde que se cerrara". Juan Venzalá Fuentes, organizador del evento, abrió el acto, haciendo un recorrido por el sentido de este centro, "para formar, enseñar y educar a niños y hombres del pueblo". Al evento se dieron cita más de 300 antiguos alumnos llegados de todos los puntos de España. El último director del colegio, Leandro, expresó la gratitud de los salesianos. Antonio Altarejos resaltó la filelidad de los antiguos alumnos a los valores religiosos. Acto seguido intervino, Leandro Maíllo, quien, llegado de Granada, leyó un manuscrito realizado por él y dedicado a los Antiguos Alumnos Salesianos, agradeciéndoles su invitación, "en este antiguo campamento del Abad Pedro, donde unos años estuvimos los hijos de San Juan Bosco educando y evangelizando, y de manera particular quiero felicitar a Juan Venzalá Fuentes por su trabajo y entusiasmo en pro de este montaje, asentado en el real de la feria de Pedro Abad, expresión de gratitud y cariño a los salesianos". También pidió que no se pierda el amor a María Auxiliadora, "que seáis honrados ciudadanos y buenos cristianos, y que conservéis siempre la alegría, que es lo que representa un ferial para un pueblo".