Narra, con mezclas de humor, erotismo, dramatismo y suspense
las vivencias de una mujer republicana desde los 11 hasta los 25 años
La Peña Relámpago ha apadrinado
en Pedro Abad la presentación, en el salón de actos del colegio SAFA Rafaela
María, de la novela “La herencia envenenada”, de Ángel Polo García, un título
que no pasará desapercibido en el panorama literario español, no solo por la
trama narrativa, sino por todo lo que en ella se plasma y porque el final
sorprendente deja perplejo al lector. Esta novela es un vaivén entre actualidad
y recuerdo que mantiene, entre capítulo y capítulo, en vilo al lector, donde no
falta el humor, el erotismo, el dramatismo y el suspense. Esta “ópera prima de
Ángel Polo”, como dijo el presentador del libro, Juan María Muñoz, tiene tintes
de ser llevada al cine algún día, ya que narra perfectamente, sin entrar en
vencedores ni vencidos, en la historia de una mujer republicana que desde los 11 a los 25 años se ve
envuelta en un mundo de contradicciones.
La
alcaldesa de Pedro Abad, Magdalena Luque, “esta obra nos va a llegar muy hondo,
ya que el mundo rural está reflejado en cualquier puedo de nuestra provincia,
donde se reflejan las costumbres de una época y la forma de vivir”. Luque hizo
referencia al anterior trabajo del autor, “Felices años difíciles”, “que lo
devoré enfrentándome y evocando juventud y niñez”. Concluyó diciendo que “el
gran milagro de esta historia que nos cuenta Ángel es verla impresa y este
libro se multiplica, gracias a la magia de la literatura”.
Juan
María Muñoz destacó “el valor artístico de Ángel Polo, no solo a nivel
literario, sino también pictórico”. Lo calificó de “persona polifacética,
artista y con un perfeccionismo discreto”. Sobre el libro apuntó que “engancha,
ya que lo ha elaborado con un engranaje tan perfecto que subyace en el lector
una continuidad perseverante de querer seguir con el siguiente capítulo”. El
guión se ha reforzado con el añadido de dos paralelismos argumentales tan
relevantes que cualquiera de ellos por sí solo podría motivar otra novela,
“como son la lucha de la protagonista, una mujer republicana, para adaptarse a
un entorno arcaico y eminentemente religioso; y su inmoderada sexualidad,
escoltada por una contradictoria virginidad”, comentó Muñoz. La narración se recrea por los
pequeños sucesos de la vida cotidiana, que dan a conocer o recordar una forma
de vida no muy lejana, pero muy distinta a la actual.
Ángel
Polo intervino finalmente señalando a mujeres asistentes al acto, a las que
dijo que “la protagonista, Carmela, puede ser cualquiera de vosotras, ya que
cuando la leáis vais a entrar en el cuerpo de esta mujer, como yo cuando me la
inventé”. La obra transcurre entre Madrid y Alquería de los Olivos, un pueblo
imaginario de la provincia de Córdoba. Por último, dijo que “el título de la
novela era La Casa de la Molina, pero, tras leérsela Luis Miguel Fernández,
jefe de sección en Diario CÓRDOBA, quien me impulsó a publicarla, y me sugirió
que le pusiera “La herencia envenenada”, por lo que creo que ha sido un
acierto”. Su lectura no les defraudará.
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