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| Francisco Gómez Molina. CASAVI |
Ha fallecido a los 81 años de edad Francisco Gómez
Molina (Pedro Abad, 27 de junio de 1933). Carpintero de profesión y vocación, fue
durante su vida laboral un gran ebanista. Entre otros muchos trabajos, destaca
su participación en la reforma de la ermita del Cristo de los Desamparados, de
Pedro Abad, a comienzos de los años sesenta. Concretamente, en la puerta
principal se puede observar el sello con su nombre y el de “Rojitas”. Perabeño
de nacimiento y madridista hasta el último momento de su vida. Asistía a la
peña de su pueblo para ver todos los partidos de su equipo. Ha sido siempre un
hombre muy culto. Aprendió a leer a los cuatro años para, durante la guerra
civil, poder leerle a su madre las cartas enviadas por su padre. Fue fundador
de la hermandad de San Juan y hermano mayor de la misma durante muchos años. Francisco
era un hombre ordenado, metódico, recto en sus convicciones y muy solidario.
Disfrutaba recorriendo las calles de su pueblo, del que estaba enamorado, sobre
todo por su historia, y gran defensor de su patrimonio. Su vocación por la
cultura le llevó a fundar, junto a otros vecinos de la localidad, el Círculo
Cultural Francisco Alcántara, del cual fue el primer presidente durante más de
ocho años. Destaca su gran contribución al desarrollo de esta asociación. Él
fue el creador del lema “Pedro Abad en la ruta de la Historia”, con la que
quería resaltar el valor histórico y cultural de su pueblo. También
perteneció durante muchos años a la junta directiva del Hogar Parroquial. Estaba
casado con Juana García, con la que tuvo tres hijas. Su compromiso sigue al día
de hoy vivo en Catalina, Paqui y Belén, mujeres activas en asociaciones y
hermandades sin ánimo de lucro, que trabajan de forma incansable por una sociedad
mejor: Esclavas del Sagrado Corazón, Caritas, GPS, Genso, etcétera.
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